Envases más pequeños y eficientes: la evolución de los detergentes para la ropa
En el pasado, hacer la colada era sinónimo de cargar con cajas pesadas o grandes botellas de detergente que ocupaban un espacio valioso en casa.
Sin embargo, con el tiempo y gracias a las innovaciones continuas en la industria, el panorama de los detergentes para la ropa ha cambiado significativamente. El cambio hacia la reformulación inteligente y unos envases compactos ha permitido sustituir esos packs gigantes por formatos más estilizados y de menor tamaño.
Para eso es necesario invertir en innovación y tecnología. El detergente para la ropa que ves hoy en las estanterías cuenta la historia de un avance científico y de métodos de limpieza más inteligentes que han evolucionado durante décadas.
¿Son más pequeños ahora los envases de detergente?
Si echamos la vista atrás 30 o 40 años, los detergentes para la ropa eran bastante diferentes. Requerían una mayor cantidad de activos para lograr resultados de limpieza eficaces, lo que llevaba a envases más grandes y dosis más altas por cada lavado.
A medida que avanzaba la innovación científica, las marcas de detergentes desarrollaron tecnologías de limpieza más eficientes, lo que les permitió ofrecer excelentes resultados con cantidades mucho menores. Los detergentes actuales pueden ofrecer el mismo número de lavados que sus predecesores, pero con volúmenes de producto mucho más bajos y sin comprometer los estándares de limpieza.
La innovación en envases modernos de detergente incluye ahora instrucciones de dosificación claras según la normativa europea, y muchos incorporan dispositivos de dosificación simples para asegurar que se utilice la cantidad correcta.
Un ejemplo son los productos como Ariel PODS®, que han simplificado el proceso aún más al ofrecer una dosis única, fácil de usar. Todos los detergentes de tamaño compacto están diseñados para ofrecer excelentes resultados desde el primer lavado, usando la dosis adecuada.
Limpieza más potente con menor impacto ambiental
Las innovaciones en los detergentes para la ropa llevan más de 20 años en marcha. De 1997 a 2017, la industria europea de detergentes para la colada ahorró colectivamente alrededor de 30 millones de toneladas de detergente, a pesar de un aumento del 23% en la cantidad de cargas de lavado en Europa*.
Esto representa un 45% menos de consumo total de detergente. También implica una importante reducción en el uso de envases (hasta 240.000 toneladas, suficientes para llenar 20.000 camiones de recogida de residuos) y un ahorro estimado de 1,4 millones de toneladas de CO2*.
Este logro fue posible reduciendo la dosis necesaria para una sola carga casi a la mitad. La dosis recomendada pasó de 150 gramos a finales de los años 90 a menos de 75 gramos en detergentes en polvo, y de 150 ml a menos de 55 ml en líquidos*.
Esta reducción se ha conseguido mediante formulaciones e ingredientes más eficaces. La tendencia hacia un menor uso de detergente, junto a envases más pequeños, continúa hoy, ofreciendo beneficios que no solo se limitan a la comodidad de uso.
Productos más pequeños donde menos es más
A pesar de las ventajas de los envases más pequeños y los productos compactos, persiste una idea errónea habitual: ¿este nuevo packaging minimalista sigue ofreciendo un producto de calidad o por el mismo precio tenemos menos cantidad para encubrir una subida de precios?
Los compradores comparan con frecuencia precios y volúmenes entre detergentes, pero cuando se trata de distintas generaciones de productos e innovaciones y tendencias de packaging más pequeños, comparar pesos o litros puede ser engañoso.
La forma más eficaz de comparar detergentes es observando el número de lavados que ofrece cada envase o botella. Cada envase de detergente muestra esta información, generalmente mediante un icono de cesta con un número.
Esto permite a los consumidores identificar fácilmente el número medio de lavados por envase. Al comparar detergentes, céntrate en el número de lavados en lugar de mililitros o gramos.
Reformulación de productos: el secreto detrás de los detergentes compactos
Entre las muchas innovaciones que hicieron posible un producto más ligero, pequeño y manejable, la evolución de las enzimas destaca como un habilitador clave. Estos activos limpiadores especialmente diseñados actúan eficazmente sobre las manchas difíciles, incluso en agua fría.
Las enzimas son ingredientes de limpieza que descomponen una partícula de suciedad y pasan a la siguiente, trabajando continuamente desde el inicio del lavado hasta el final. Por lo tanto, solo se necesita una pequeña cantidad para lograr resultados impecables, sustituyendo mayores volúmenes de ingredientes tradicionales y dando lugar a productos que, aunque pequeños (en comparación con sus predecesores), ofrecen un rendimiento de limpieza infinitamente superior.
A lo largo de los años, se han diseñado nuevas generaciones de enzimas para funcionar mejor a temperaturas más bajas, en respuesta a nuevas tendencias de consumo en hábitos de lavado, tejidos y percepciones sobre sostenibilidad. Este desarrollo las convierte en elementos vitales para poder reformular los productos para que sean más pequeños y eficaces.
Además, son un habilitador clave para reducir la temperatura de lavado, ahorrar energía y disminuir las emisiones de CO2. Un ejemplo destacado de esta innovación es la tecnología Purezyme utilizada en Ariel, inspirada en enzimas presentes en algas marinas.
Por otra parte, los activos tradicionales en detergentes (los tensioactivos) también han evolucionado para ser más eficientes. Los detergentes modernos suelen contener combinaciones cuidadosamente estudiadas de tensioactivos que actúan combinados para ser más eficaces sobre una mayor variedad de sustancias grasas, en diferentes condiciones, incluyendo cargas más pesadas y todas las temperaturas, incluso en frío.
En Ariel, llevamos más de 50 años perfeccionando nuestras fórmulas de detergentes para la ropa, buscando continuamente nuevas formas de mejorar la eficacia de limpieza y sorprender a nuestros consumidores. Nuestros investigadores están dedicados a explorar los últimos avances científicos para mejorar nuestros productos.
¿Qué significa esto para tu colada?
En resumen, contar con envases más pequeños no significa que vayas a tener menos lavados o peores resultados de limpieza. Todo lo contrario: gracias a todos los años de innovación científica, al comprar un detergente compacto estarás contribuyendo a crear unos hábitos en la colada más inteligentes, con productos que son potentes y más pequeños gracias a la reformulación y la reducción de producto.
Así que, la próxima vez que veas un detergente de menor tamaño en la estantería, recuerda que representa décadas de progreso, ofreciendo resultados de lavado sobresalientes mientras ahorra espacio y reduce nuestro impacto ambiental.